El programa ERASMUS (acrónimo de European Region Action Scheme for the Mobility of University Students) fue creado en 1987 y a finales del pasado año 2017 cumplió 30 años ofreciendo ayudas a los jóvenes universitarios, fomentando el aprendizaje, la cultura y las costumbres del que se convierte en país anfitrión y, sobre todo, fomentando la vida social y con ello haciendo que nazcan nuevas relaciones y sus llamados ‘Erasmus babies’. Con este nombre se designa a los hijos nacidos del amor Erasmus, que ya sobrepasan el millón y que, gracias a este aniversario, la Comisión Europea ha buscado para realizar una foto de familia en Madrid el pasado diciembre. Para esto que hemos creado un pequeño Storify para quien quiera saber un poquito más:
Dejando a un lado los frutos académicos de esta beca (y los no tan académicos) nos centramos en que Erasmus ha dado la posibilidad a más de nueve millones de personas, de las que alrededor de 952.000 son españolas, de enriquecer su formación de una forma diferente.
Desde Milla Cero hemos hablado con Estela Torres, estudiante de ADE que en 2016 vivió la experiencia gracias a Erasmus+ de cursar un cuatrimestre en Taipei, Taiwán; viviendo lo que califica como los mejores cinco meses de su vida.
¿Cuánto tiempo estuviste allí, cómo de rápido se te pasaba el tiempo?
Me fui a principios de septiembre de 2016 y volví a principios de enero del pasado año, por lo que he estado allí cinco meses. Al principio, los días pasaban un poco lentos porque me estaba acostumbrando a una nueva ciudad, pero luego, cuando llegó la vuelta a casa y fui consciente me di cuenta de que el tiempo había volado. Habían pasado cinco meses de mi vida y parecía que tan solo hubiese pasado una semana.
¿Qué consejo le darías a alguien que se va de Erasmus? ¿Y si fuese a Taipei?
A alguien que se va de Erasmus le diría que vaya donde vaya seguro va a ser la mejor experiencia de su vida. Conoces muchísima gente, vives solo, exploras otro país y otra cultura y vives una experiencia inolvidable.
A alguien que se vaya a Taipei le digo que es una ciudad increíble, jamás me esperaba que fuese así. Al principio tuve miedo pero, conforme fueron pasando los meses, reafirmaba mi opinión de que es increíble. Motivaría a la gente para ir allí porque es una ciudad brutal y no me arrepiento para nada de haberla elegido.
Cuéntame algo acerca de su cultura. ¿Qué nivel de vida tienen? ¿Notas mucha diferencia de clases?
La vida en Taipei es totalmente diferente, no solo a la de España sino a la de toda Europa e incluso Estados Unidos. Es verdad que no es una ciudad con una cultura tan asiática como podrían ser algunas de China, pero hay mucho cambio cultural puesto que todo es diferente. Sobre todo por los Nights Markets, donde puedes comer por dos euros además de comprar ropa.
Night Market , Estela Torres
Por otro lado, pienso que no hay mucha diferencia de clases. No he visto muchos pobres pero sí es verdad que la gente allí gana sueldos mucho más bajos que en España, aunque a pesar de esto considero que allí son mucho más felices que aquí.
¿Por qué piensas que allí son más felices?
Porque opino que la gente allí es feliz con lo que tiene, sin buscar la riqueza ni pedir nada más de eso.
¿Cómo es la gente de allí?
La gente de allí no tiene nada que ver con los europeos, entre otras cosas, son extremadamente educados y respetuosos. La gente vive muy relajada y disfruta cada momento. De esto me di cuenta principalmente en el metro, son muy organizados.
¿Qué viajes has hecho estando allí?
He visto casi todo Taiwán, puesto que al ser una isla bastante pequeña es fácil moverse, estaba bien comunicada. He ido a Corea del Sur, a Indonesia y Tailandia. La ventaja de irte de Erasmus tanto a Taiwán como a cualquier sitio es que además de conocer la ciudad en la que vives, conoces los alrededores y los países cercanos, que de otra forma tal vez no hubieses visitado.
Seúl, Corea del Sur, Estela Torres
¿Cuál ha sido el que más te ha gustado y qué te ha llamado la atención de esos sitios?
El que más me ha gustado ha sido Tailandia, en particular Koh Phi Phi. Es una isla espectacular, con muchísima fiesta, con unos pubs increíbles en medio de las playas y unos paisajes preciosos siempre con el agua cristalina.
Lo que más me ha impresionado de aquí es que la gente es muy pobre pero son felices con apenas nada. Simplemente con el hecho de ir a comer en su bar, donde comes por menos de cinco euros, ves como se alegran y están contentos.
Koh Phi Phi, Estela Torres
Koh Phi Phi, Estela Torres
¿Qué es lo que más has echado de menos de tu ciudad?
Lo que más he echado de menos de mi ciudad es que es bastante pequeña. Aquí tardo 12 minutos en llegar a la universidad en moto, mientras que en Taipei tardaba 45 minutos en metro, y una vez que me bajaba de éste tenía que andar 10 minutos hasta mi edificio.
¿Has conocido muchos españoles? háblame de ellos. ¿Seguís teniendo relación?
Cuando salí de aquí pensaba que iba a ser la única española, no conocía a nadie. Pero cuando llegué conocí alrededor de unos quince españoles.
Mi grupo lo formábamos diez, la mayoría de Madrid o Barcelona, yo era la única andaluza. Son todos geniales, muy buenas personas, aventureras, con mucho dinero pero no se mueven por eso nunca; con ganas muchas ganas de disfrutar de la vida.
Sí, tenemos relación, hace un mes fui a verlos a Barcelona y nada había cambiado. Parecía que seguíamos en Taipei, los echo mucho de menos y la verdad que son lo mejor que me llevo de allí.
¿Qué es lo que más echas de menos de allí?
Poder hacer lo que me dé la gana en cada momento, es decir, si no me apetece ir a clase no voy, si me apetece salir o comprarme algo lo hago. En definitiva, La independencia económica y de la vivienda, porque podía entrar y salir cuando me diese la gana.
¿Qué es lo que más te ha llamado la atención?
Una de las cosas que más me ha llamado la atención es el estilo de vida que llevan. Son muy tranquilos, felices con lo que tienen sin esperar a ser cada vez más ricos. No tienen la mentalidad que hay aquí de “cuanto más tengo, más feliz soy” sino que se conforman con poco. Viven el momento, te acogen muy bien y no te miran raro por ser europeo.
¿Y en cuanto al lugar?
Los váter. Están casi a ras del suelo y tenías que hacer pipí en cuclillas.
Estela Torres
