Perdidos (lost) da nombre a una serie de televisión, en la que todos los que hemos podido disfrutar de ella nos hemos imaginado qué pasaría si estuviéramos en una isla sin apenas contacto con el exterior, preguntándonos si sobreviviríamos. Pues bien, ahora imagínense que esto es real. Aquí comienza el viaje a la Isla de Sentinel.
Situada en la India existe una pequeña isla, en la que sus peculiares habitantes están absolutamente aislados del exterior. Este pueblo desciende de las primeras poblaciones de humanos provenientes de África y se estima que han habitado la isla desde hace más de 55.000 años. Además, se cree que su población oscila entre 50 y 500 sentineleses.
Se desconoce si sus habitantes tienen una organización social. Hasta se ha mandado a otras tribus de zonas cercanas, pero estas no entendían ni una sola palabra de lo que hablaban, tienen un idioma desconocido. Lo único que se sabe es que se alimentan de pequeños animales que cazan, peces y frutos silvestres; ni siquiera conocen la agricultura. Ahora bien, si os digo que se alimentan de carne humana, seguro que a todos se os quita la curiosidad de visitar esta isla.
Estaréis preguntándoos si sabiendo esto, algún curioso o más bien insensato ha visitado la Isla de Sentinel. La respuesta es sí; algunas de las visitas que esta población ha recibido, comienzan en 1991, cuando el antropólogo Trilokinath Prandit visitó la isla. Llegó a desembarcar en ella portando regalos para los habitantes, pero al ponerse en contacto con ellos su reacción fue hostil: comenzaron a lanzarle flechas y piedras, no le quedó otra opción que huir tras esa tan poco agradable experiencia.
Algunos de los habitantes de la isla de Sentinel
Foto: El Español
Años después, en 2004, tras el tsunami que asoló esa zona, el Gobierno indio mandó a visitar la zona a un helicóptero, para realizar una inspección de la situación y soltar paquetes de víveres en la playa, pero los sentineles al ver el pájaro de hierro (como diría Tarzán) comenzaron a lanzar piedras, flechas e insultos para sugerir que no necesitaban ayuda.
El último contacto con esta isla fue en 2006, cuando dos pescadores un tanto inconscientes llegaron para pescar cangrejos. Nunca salieron de la isla. Tal vez ese día tuvieron un festín a su costa.
Después de todos estos sucesos, el Gobierno indio ha decidido crear una zona de exclusión de 3 millas para que no se produzcan más incidentes, de hecho, si a alguien le da por visitar la zona y se salta la zona de exclusión, el gobierno no tomará medidas contra los isleños si matan a quien se acerque más allá de esos límites.
Seguro que a todos nos gustaría saber más de esta especial isla y conocer todos los misterios que la rodean. Pero, parémonos a reflexionar en lo bien que se pueden encontrar sin la actual era tecnológica, viviendo en la ignorancia del mundo que les rodea, sin tener que ver lo que es la verdadera maldad. Ellos lo único que hacen es defender su hogar y sobrevivir.