La miniserie continua en un estado primario, siendo una idea sujeta de la mano de Google, para involucrarse en el mundo del cine, y la actriz ganadora del premio a la mejor actriz en la última edición de Cannes por su papel en In the Fade, Diane Kruger. Además de ser coproductora, posiblemente dará vida a la actriz austriaca en su faceta como científica e investigadora.
Conocida por recrear el primer orgasmo en la historia del cine, en la película checoslovaca Éxtasis y por el éxito de numerosas películas de origen alemán y posteriormente estadounidense, su papel como inventora ha pasado desapercibido por la historia. Su juventud se debatió entre continuar con sus estudios de ingeniería o perseguir su sueño de ser actriz. Tras decantarse por la segunda opción y dejar las mejores escuelas y universidades de Austria para viajó a Berlín y desembarcó en su aventura. Allí, sobre un escenario de teatro conoció a su futuro marido, Fritz Mandl, con el cual, según ella misma describió, paso una relación de amargura y sufrimiento.
Fritz contaba con una fábrica de armamento que suministraba material de guerra a las tropas de alemanas e italianas de Hitler y Mussolini. Hedy, conoció de cerca los horrores de la II Guerra Mundial. En sus momento de soledad y casi esclavitud, sumergida en un matrimonio infeliz, continuó con sus estudios de ingeniería para aprender del entorno de su marido la tecnología armamentística de la época y más tarde ceder al ejército norteamericano toda la información y colaborar con el fin de la guerra. Lamarr, de origen judío, vivió la guerra con mayor intensidad que su entorno y decidió que no era el lugar correcto para ella.
Durante esta época de sufrimiento y represión en su matrimonio, Hedy, es capaz de vivir su sexualidad de una manera libre dentro de sus posibilidades, manteniendo un romance con una de sus empleadas del servicio. Gracias a esta, y como si se tratase de una de sus películas, consigue escapar haciéndose pasar por ella, disfrazada con su ropa para salir sin levantar sospecha. Una vida apasionante, entre cálculos de ingeniería, guiones de películas, amores imposibles con hombres y mujeres y una relación tormentosa que desató en ella la fuerza suficiente para perseguir sus sueños.
Una mujer de exuberante belleza, una inteligencia abrumadora, un don para la actuación y una fuerte personalidad. A pesar de ello, su faceta como actriz es la única parte de su vida que ha sido alabada por los demás. En una época donde el papel femenino se limitaba a la extrema belleza y una actitud sensual y educada, una mujer inteligente con las ideas claras quedaba fuera del éxito. Creadora de la técnica de conmutación de frecuencias y del sistema de comunicación remoto, nuestro actual WIFI y bluetooth.
Ahora, 17 años después de su muerte, Google apuesta por revivir la esencia de esta brillante mujer como icono femenino y el auge que debió tener en su momento por su reconocimiento como actriz y como inventora. Todavía es una idea general, basada en el libro de las memorias de Hedy Lamarr, que poco a poco se desarrollará junto con la coproductora y actriz, Diana Kruger, para darle forma a la miniserie con la que se estrenará el gran gigante de internet en el mundo del cine,