Lectura Fácil es el nombre del libro que ha hecho que Cristina Morales sea galardonada con el Premio Nacional de Narrativa 2019. Su novela ha sido todo un éxito en comunidades como Madrid y Cataluña, donde resulta casi imposible hacerse con un ejemplar.
Según el periódico El País, desde Biblioteques de Barcelona afirmaban que “nunca un premio literario había provocado un éxito de estas dimensiones, ni siquiera los últimos Premio Novel habían causado tanto revuelo”. Por otro lado, un bibliotecario de la Comunidad de Madrid comentaba que “estaba siendo leída como si se tratara de un éxito de ventas, como si fuera María Dueñas o Javier Cercas”.
La sinopsis de Lectura Fácil es la historia de cuatro mujeres que presentan diversos grados de discapacidad intelectual y viven juntas en un piso tutelado. Han estado durante varios años de su vida en diferentes residencias para personas con su misma discapacidad, pero a pesar de ello son mujeres que se enfrentan a las condiciones de dominación que les ha tocado sufrir. El escenario en el que se narran los hechos es “la Barcelona opresiva y bastarda: la ciudad e los okupas, la Plataforma de los Afectados por la Hipoteca, los ateneos anarquistas y el arte políticamente correcto”. La editorial lo define como “un campo de batalla: contra el heteropatriarcado monógamo y blanco, contra la retórica institucional y capitalista, contra el activismo que usa los ropajes de “lo alternativo” para apuntalar el status quo”.
El jurado del Premio Nacional de Narrativa justificó la entrega del galardón a esta novela “por tratarse de una propuesta radical y radicalmente original, que no cuenta con una genealogía en la literatura española y que destaca por la recreación de la oralidad, unos personajes extraordinarios y su lectura del contexto político en el que se desarrolla”.
Sin embargo, no todo son elogios para la escritora. El pasado 22 de octubre, la recién galardonada quiso opinar sobre la situación que se estaba viviendo en Cataluña tras la sentencia del Procés y declaró que “es una alegría ver que haya fuego en vez tiendas y cafeterías abiertas”. Además, añadió que “la violencia es la de la Policía; lo único que se puede esperar de la Policía, que es un cuerpo violento ante el que solo cabe el sometimiento y la autodefensa”.
Ante esta declaración, Isabel Celaá, la portavoz del Gobierno, ha querido responder diciendo que “resulta sorprendente que estas palabras hayan podido ser pronunciadas”. Con la violencia, tolerancia cero. Sobre la violencia solo se puede construir más violencia”.
También el actor y dramaturgo Albert Boadella ha querido responder diciendo que “la gente que aviva el fuego son unos insensatos” y que unas declaraciones como estas lo único que buscan es “conseguir que lo que sucede en Cataluña vaya por unos derroteros que nadie quiere”.
Para concluir, el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, también ha querido criticar las palabras de la escritora diciendo que espera que “prenda fuego al cheque de 20.000 euros” que recibió por el Premio Nacional de Narrativa.