Según los datos de la Agencia Española de Meteorología (AEMET), las lluvias de este año hidrológico han sido menores de lo normal, exactamente 551 litros por metro cuadrado por debajo de la media histórica (1981-2010).
La falta de lluvia esta afectando gravemente tanto a ganaderos, agricultores, la población del país también y a su paisaje, algo que queda contrastado por los satélites de la NASA “Terra” y “Aqua”, los cuales se encargan de estudiar el ciclo del agua en el planeta y han alertado del avance de desertificación que está experimentando la península en estos últimos años.
El pasado fin de semana documentamos el valle y los pueblos anegados por el embalse de Barrios de Luna. #leonesp https://t.co/AJKCO3A4uk pic.twitter.com/Bo6szkr8ht
— Rubén Ojeda (@rubojeda) 8 de octubre de 2017
Por otro lado los embalses se encuentran en una situación extrema, estando al 38% de su capacidad total, según los datos oficiales del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente. El Gobierno ha declarado sequía prolongada en cuatro cuencas: Cuenca Mediterránea Andaluza (33,9%), Guadalquivir (32,3%), Duero (32,2%), Júcar (26%) y Segura (14,3%).
Según los estudios, este tipo de fenómenos puede empeorar en el futuro debido al cambio climático, por lo que desde el Gobierno se pide un uso responsable de este bien. "Todos los ciudadanos, con independencia de que haya escasez o no de agua de que las reservas hídricas estén más altas o más bajas, tenemos que concienciarnos de que el agua es un bien natural, es un bien escaso y que no tenemos que despilfarrarlo" declaró Cristina Cifuentes, presidenta de la Comunidad de Madrid.