El pasado julio de 2017 la Comisión Europea (CE) advirtió a las plataformas Google +, Facebook y Twitter para que adaptasen sus prácticas, términos y condiciones a la normativa de consumo y leyes de protección de consumidores de la Unión Europea.
En febrero de 2018 Google + ya se adaptó a las reglas de la CE, pero a día de hoy Facebook y Twitter siguen sin hacerlo, a pesar de todas las advertencias que han recibido desde entonces, y a pesar de haberse comprometido a adaptarse a los cambios desde un primer momento.
En Bruselas preocupa Facebook particularmente, ya que se les acusa de haber usado datos de usuarios sin su consentimiento para venderlos a terceros en Estados Unidos y Reino Unido.
“No mucha gente sabe que Facebook ha hecho accesible esa información a terceras partes o que, por ejemplo, tiene todos los derechos de autor sobre cualquier foto o contenido que subes, incluso después de borrar la cuenta” insiste la Comisaria de Justicia y Consumo, Vera Jourova.
Entre los problemas causados por la política del uso de datos de Facebook, se acusa a la empresa Cambridge Analytica de haberse hecho con los datos de más de 50 millones de usuarios y de haberlos manipulado para influir en procesos electorales, específicamente durante la campaña electoral de Trump. La empresa creó un programa que predecía los votos de los usuarios, para más tarde poder influir sobre la decisión de voto.
La CE busca que Facebook sea totalmente honesta y transparente con sus usuarios en la forma en que usan sus datos y cómo la empresa obtiene beneficios. Preocupa también la falta de conocimiento que tienen los usuarios sobre el uso de la información compartida una vez estos acaban el contrato.
El dialogo lleva ya casi dos años y aunque se han adaptado en algunos ámbitos menos importantes, sigue sin haber un cambio por parte de Facebook en lo que respecta a los términos y condiciones de uso, y se espera que en octubre se hayan introducido finalmente los cambios demandados, o de lo contrario pedirán a las autoridades nacionales que sancionen a la compañía.
“Continuaremos el diálogo, pero no para siempre, porque si este diálogo no funciona ayudaremos a las autoridades nacionales a lanzar medidas coordinadas” Jourova.