jueves. 21.11.2024
El Growth Hacking permite a las empresas superar sus objetivos de manera exorbitante

Cómo aplicar el Growth Hacking a tiendas online para vender más

Las metas que se marquen en una empresa pueden ser variadas. Desde obtener ciertos registros en la página web, hasta alcanzar un número determinado de ventas. Todo esto puede potenciarse gracias a las técnicas de Growth Hacking, que pretenden superar estos propósitos de forma rápida y muy efectiva.

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Técnicas de Growth Hacking para crecer en tu negocio. Foto: Shutterstock

El Growth Hacking es una práctica de mercadotecnia que consiste en conseguir resultados escalables y de alto impacto, con el menor coste y tiempo empleado posible.

Gracias a la colaboración de Víctor Campuzano, director de marketing en Grupo Graphic, hemos podido conocer algunas de sus estrategias personales para lograr sus objetivos digitales.

La clave del Growth Hacking está en la analítica web

Para poder mejorar, hay que medir.

Es fundamental hacer uso de herramientas que nos permitan conocer, de la forma más detallada posible, los resultados de las campañas que realicemos. De lo contrario, estaremos actuando sin ninguna guía y según creencias que pueden ser erróneas.

Conviene delimitar un embudo de conversión, es decir, establecer qué pasos debe seguir el potencial cliente antes de finalizar el objetivo (una venta, por ejemplo). Con una herramienta como Google Analytics se pueden realizar eventos o filtros que ayuden a esta tarea.

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Google Analytics es una herramienta de analítica web. Foto: Entrepeneur.com

De esta forma podremos detectar en qué paso se pierde el cliente, realizar pruebas que mejoren los resultados actuales, y medir el impacto de cada acción de marketing que se realice.

Pruebas de optimización con “Google Optimize”

Uno de los conceptos más repetidos en cuanto a optimización de la conversión es el denominado test A/B (o A/B testing), que consiste en realizar una serie de variaciones sobre una misma página web, para analizar cuál logra un mejor resultado.

Algunas de estas variaciones se pueden realizar sobre los colores en botones de compra, el texto usado para el botón de la llamada a la acción, u otros elementos que ayudan a vender más con una tienda online.

Aunque las herramientas para realizar pruebas A/B son numerosas, Campuzano destaca una gratuita y que ofrece multitud de opciones: Google Optimize, que ofrece a un porcentaje determinado de visitantes una versión u otra del mismo sitio. Tras la finalización de la prueba, podemos ver qué impacto ha tenido cada una en cuanto a conversión y establecer los elementos definitivos.

Las “push-notifications” para notificar en el móvil

Una de las tendencias actuales en marketing online son las “push-notifications”, que son notificaciones que aparecen en la pantalla principal de nuestro móvil sin tener que acceder a la app en cuestión.

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Ejemplo de push-notifications en un iPhone. Foto: Tooket.com

En un primer momento, las únicas apps que hacían uso de esta tecnología eran las redes de mensajería instantánea como WhatsApp, pero poco a poco han ido ampliándose a periódicos y páginas web de interés general.

Si atendemos a las ventajas de estas notificaciones, encontramos que el usuario le da mucha importancia, por lo que captaremos su atención de una forma muy eficiente y sencilla.

No obstante, si se hace de un modo recurrente para avisos que no son urgentes, el usuario  podría verlo como un abuso y provocar el efecto contrario.

Víctor Campuzano comparte algunas buenas prácticas como “notificar de una oferta online que desaparece en 24 horas” o “avisar de la incorporación de nuevos productos limitados al catálogo”.

Los chatbots para automatizar procesos y fidelizar

Otra tendencia notable es el uso de chatbots, que consiste en ofrecer un soporte en medios de mensajería instantánea (Telegram, Facebook Messenger, WhatsApp…) gracias al uso de comandos.

Algunas de las herramientas para hacer chatbots son ChatFuel, dedicado a Facebook Messenger y que trabaja con el uso de condicionales, y DialogFlow que, además, usa inteligencia artificial y procesa el lenguaje natural.

Esta última característica es interesante para que la conversación sea lo más fluida y realista posible, ya que lo normal es que un chatbot responda si se pregunta con un patrón exacto (por ejemplo, “tiempo Córdoba” para saber el tiempo en Córdoba). Con esta tecnología, sin embargo, el bot detectará cualquier variante para esa consulta (“dime qué tiempo hará en Córdoba” o “¿Qué tiempo hace en Córdoba?”, por ejemplo).

En definitiva, debemos dar un paso más allá de lo que estamos acostumbrados a ver y escuchar para descubrir nuevas herramientas que nos permitan crecer en cualquier ámbito.