El pasado enero de 2018 el Programa para Partners de Youtube sufrió grandes cambios, lo que ha supuesto la pérdida de ingresos de miles de canales de YouTube y disminuirá las posibilidades de ganar dinero en la plataforma.
Este programa permite que los creadores puedan recibir dinero a partir del contenido que crean en la plataforma, obteniendo ingresos mediante los anuncios que se muestran en sus vídeos y con los subscriptores de YT Premium que vean su contenido. Cualquier persona con un canal de Youtube puede aplicar, y una vez tu canal llega a tener los requisitos establecidos, YouTube se encargará de analizarlo y permitirá participar en el programa.
Tras los cambios que se han llevado a cabo, ahora es necesario tener más de 1.000 suscriptores, y un mínimo de 4.000 horas de visionado en total. Previamente a estos cambios, era suficiente con tener un canal con más de 10.000 visitas totales, por lo que muchos creadores han quedado expulsados del programa. A su vez, YouTube revisa el contenido de cada canal, asegurándose de que no sea “inapropiado” de acuerdo con unas normas, para que la reputación de las marcas que publicitan en esta web no se vea manchada por los vídeos en los que se publicitan.
“Claramente los youtubers no van a tener muchas oportunidades de monetización en la plataforma y esto ocurre precisamente cuando a YouTube/Google menos le interesa un ecosistema de creadores tan amplio” asegura Asensi.
La meta de Youtube es cada vez más clara: tiene la intención de convertirse en una plataforma de streaming profesional que esté al nivel de Netflix y Amazon, por lo que su principal objetivo es tener contenido de calidad, y poco a poco está dejando de ser una plataforma que promueve y apoya el contenido independiente de creadores nativos para centrarse en este.