La semana en que debía comenzar la nueva legislatura de Aung San Suu Kyi, líder de la Liga Nacional por la Democracia en Myanmar, el Ejército ha tomado las instituciones tras mostrar su rotundo rechazo al resultado de las elecciones. Desde entonces, la líder política ha estado incomunicada y detenida por el Ejército, al igual que numerosos activistas.
General Min Aung Hlaing. Wikimedia: Marcelino Pascua
El general Min Aung Hlaing, principal responsable del genocidio de rohinyas, ha notado las riendas del poder tras apenas 10 años desde que se inició la transición democrática hacia un gobierno civil, por lo que hay temor de regresar a los 50 años de gobierno militares. El ejército birmano goza de muchos derechos que teme perder si la ganadora del Nobel de La Paz continúa en el poder: tienen un 25% de los parlamentarios en el Senado y tres de los ministerios más poderosos del país.
Acusaciones "trumpianas"
Las acusaciones de fraude, sin embargo, guardan estrecha relación con aquellas presentadas por la administración de Donald Trump para intentar revocar el resultado de las elecciones recuerdan mucho a las acusaciones de fraude defendidas por el general Min Aung Hlaing: el subdirector de Human Rights Watch en Asia reporta que "obviamente, Aung San Suu Kyi obtuvo una contundente victoria electoral", añadiendo además que "ha habido acusaciones de fraude electoral. Es algo trumpiano: acusaciones de fraude sin evidencia".
"Aung San Sus Kyi obtuvo una contundente victoria electoral", reporta Human Rights Watch
La comunidad internacional no ha dudado en condenar el golpe de estado a las instituciones birmanas, y piden la liberación inmediata de Aung San Suu Kyi y de su gobierno. Los principales líderes políticos han tomado las redes sociales para mostrar su rechazo y condena a un nuevo ataque a la democracia, menos de un mes después de que Donald Trump instara el asalto al Capitolio en Washington DC. Entre los líderes políticos que han condenado el ataque se encuentran el Presidente del Gobierno Pedro Sánchez o Justiin Trudeau, Primer Ministro Canadiense.
España condena el golpe de Estado en Myanmar. Pedimos la inmediata liberación de todas las personas detenidas y el restablecimiento del proceso democrático. La Constitución y los resultados electorales deben ser respetados.
— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) February 1, 2021
Además, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas se reunirá durante el martes 2 de febrero para abordar posibles soluciones y medidas contra esta crisis en el país del sudeste asiático. La reunión, catalogada como "reunión de emergencia", se celebrará a puerta cerrada y por videoconferencia, de acuerdo con las medidas de protección de la COVID-19. Se espera que se tome alguna clase de medida contra el régimen instaurado por el Ejército birmano, pero EE.UU ya ha tomado la iniciativa: la administración de Joe Biden va a estudiar la posibilidad de volver a sancionar económicamente al país asiático. El Gobierno estadounidense ya impuso sanciones económicas durante los cincuentenaria años de gobierno militar. Ahora, la historia puede volver a repetirse.
