La naturaleza nos avisa cuando se avecina una tormenta. El cielo se ennegrece, el viento sopla más fuerte, los pájaros vuelan cada vez más bajo, ya que la presión previa a las tormentas les provoca dolor. Se escuchan truenos, advirtiéndonos de lo que está por venir. La naturaleza nos avisa para que estemos preparados y no nos tome por sorpresa. Para que tomemos medidas.
Según El Plural, en los últimos 15 años, alrededor de 920 hombres han asesinado a sus parejas o exparejas, así como a sus hijos. Según Eurostat, más de nueve de cada diez víctimas de violación en la UE durante 2015 fueron mujeres: se registraron 80.000 agresiones. Según Cadena Ser, en España, se denuncian cada año más de 1.200 violaciones. Son tres al día, una cada ocho horas. Según Eldiario.es en 2018, se denunciaron 788 agresiones sexuales, un 28, 5% más que el año anterior. 50 mujeres han sido asesinadas hasta el 31 de octubre de 2019, según el Ministerio de Interior. Pero parece no ser suficiente.
Fuente: Ministerio de Interior, Eldiario.es
En España, los datos de violencia de género solo cuantifican la violencia a manos de parejas o exparejas. Según el Convenio de Estambul ratificado en 2014, nuestro país tendría que incluir en esta categoría los matrimonios forzosos, las mutilaciones genitales y la trata, además del acoso sexual, la violencia sexual o incluso la asistencia, complicidad o intención de algunas de estas acciones, pero no las contempla. Además, según la ONU, que el agresor fuera o no pareja sentimental de la víctima, no es el dato determinante para llamarlo o no violencia de género.
Estamos ante los momentos previos a la tormenta. El cielo se ennegrece. Cada vez son más las chicas que se están rebelando. Que dicen que ya basta. Que están denunciando situaciones de acoso, de abusos, de presión. Queremos divertirnos, queremos pasear, queremos decidir, queremos vivir como queramos. Que para algo es nuestra vida y no la de los demás.
El viento sopla cada vez más fuerte. No queremos tener que estar pendientes de si es demasiado tarde para volver solas a casa, de si la falda es muy corta, de si voy muy maquillada, de si mi ex se va a enfadar. No queremos que nuestro cuerpo sea constantemente juzgado, no queremos que nuestra valía esté constantemente puesta a prueba.
"El violador eres tú": la performance feminista contra el patriarcado y el machismo llega desde Chile y México hasta España.
— 6W (@6W_es) December 1, 2019
Imagen en Madrid pic.twitter.com/EUhqaXkrKp
Los pájaros vuelan cada vez más bajo. Cada persona debería tener el poder de controlar su propia vida, de decidir cómo vestirse, decidir si quiere tener hijos o no, decidir si le apetece salir hasta tarde, decidir si quiere dedicar su vida al trabajo o a la familia, decidir decir NO a alguien. Nadie debería sentir miedo mientras se divierte.
Se escuchan truenos. No tenemos que aguantar vuestras bromas, no tenemos que aguantar vuestras críticas, no tenemos que aguantar vuestras dudas, no tenemos que aguantar vuestro miedo injustificado. No queremos que se nos enseñe a defendernos, queremos que se enseñe lo que es el consentimiento, lo que es el respeto, lo tóxico que es ese concepto de masculinidad que nos inculcan, tanto para nosotras como para vosotros.
La tormenta se acerca y os estamos avisando. Más vale que tomemos medidas.